PHILADELPHIA – Incluso tras la difícil derrota por 1-0 en los cuartos de final ante Estados Unidos que eliminó a su equipo de la Copa Oro 2019 de la Concacaf, el entrenador de Curazao, Remko Bicentini, todavía se mostró lleno de orgullo en la conferencia de prensa en el Lincoln Financial Field de Filadelfia.

“Estoy muy orgulloso de mi equipo”, dijo Bicentini. Trabajamos duro. Lo hicimos todos juntos. Disfrutamos del torneo aquí, de la gente, los fanáticos”.

Tras clasificar a su primera Copa Oro en 2017, mostrar algo de fútbol de calidad y atrapar la atención de la región a pesar de tres derrotas 2-0 consecutivas que significaron su eliminación en la fase de grupos, Curazao regresó a la Copa Oro con un propósito.

Luego de perder 1-0 en el debut del Grupo C ante El Salvador en Kingston, Jamaica, Curazao continuó con una victoria 1-0 ante Honduras, para registrar su primer triunfo en Copa Oro. Ese resultado lo acompañó con un empate 1-1 con Jamaica en Los Ángeles, y la caída de El Salvador frente Honduras significó la clasificación de Curazao a la ronda de eliminación directa por primera vez. Haber avanzado a los cuartos de final fue claramente más que sólo un logro.

Curazao superó a Estados Unidos en Philly, con Leandro Bacuna casi marcando el empate del partido, pero el arquero norteamericano Zack Steffen se lo negó.

“Después de todo,” dijo Bicentini, “estoy feliz. Los jugadores están felices. Curazao está feliz. Por lo único que no estoy contento es que no ganamos”.

Antes de abandonar el estadio, Remko les agradeció a varias personas y agregó: “Espero que todos nos volvamos a ver en dos años”.